denuncia , discriminación , libertades , noticias , racismo , Ray de Lima , sociedad Lunes, 27 noviembre 2017

«Incluso si ignoramos el racismo, ‘la Paisana Jacinta’ sigue siendo una de las peores películas hechas en Perú»

Título original: La cumbre del cine peruano: “La paisana Jacinta: en busca de Wasaberto”

Esta producción de Big Bang Films desafía toda expectativa que uno podría tener sobre el personaje clásico de la televisión de los 90. Un guion innovador y performances inspiradas de parte del hilarante elenco podrían significar la reivindicación de Jorge Benavides como artista y cómico peruano. No, mentira. ‘La Paisana Jacinta’ es pésima y súperracista.

Primero es importante sacar algo del camino: que incluso si decidiésemos ignorar el racismo explícito de La paisana Jacinta, aún así sigue siendo una de las peores películas hechas en la historia del Perú. Quizá sea poco necesario darle más vueltas al tema racial debido a que probablemente todas las publicaciones y comentarios sobre esta peli se centrarán en el latente asunto de qué tan políticamente incorrecta es.

Pero a mí me hace reír”, puedes estar pensando.

Felicitaciones: te dan risa cosas racistas.

Pero incluso a los racistas les puede apasionar el cine así que a continuación vienen un par de párrafos sobre las tecnicalidades en las que falló la peli antes de que entremos al tema obligatorio caviar-liberal sobre el daño social que causa un personaje como la Paisana Jacinta.

Cosas técnicas

La peli es mala. Está mal hecha. El guion no tiene nada de sentido, la actuación es ridículamente floja y la dirección quizá podría batir un récord mundial en inconsistencia.

La cinta está construida en base a una irrelacionada escena tras otra cuyo único propósito es ver a la Paisana interactuando con algún personaje random en alguna situación que jamás llega a cuajar en algo parecido a un desarrollo narrativo.

En vez de punchlines, todas las escenas cómicas concluyen con la Paisana haciendo alguna mueca rara de confusión. Así están estructurados el 100% de los chistes de la historia: “a la Paisana le dicen cosas que no entiende y ella las malinterpreta”.

A diferencia de los sketches de la Paisana para la tele, en una peli cada escena no puede terminar con un apanado chacotero. Es allí cuando nos damos cuenta de que un personaje tan unidimensional quizá no haya sido la mejor opción para adaptar al cine y que además muy probablemente los guionistas se fueron en floro con su incapacidad de escribir chistes y en su lugar decidieron echarle todo el peso al ya desaparecido carisma de Jorge Benavides.

Uno de estos días se nos va en Robin Williams

Uno de estos días se nos va en Robin Williams

Felizmente el mal guion encaja con la mala actuación de todos los personajes secundarios cuando te das cuenta de que ni siquiera pueden fingir que les da risa los chistes de la Paisana. Escenas incómodas abundan tanto como los cameos innecesarios de celebridades locales incluyendo a Julinho y a la amiga de Peluchín.

No solo las estrellas invitadas no desarrollan buenos papeles como actores, sino que además sus participaciones son totalmente forzosas e improvisadas.

Hablando de malas decisiones en el casting, la peli también incluye el personaje de una chibola lustrabotas interpretado por una niña blanca y rubia, cuyo acento parece un español que hubiese sido aprendido ayer.

¿Por qué castearon a una niña rubia para lustradora de zapatos?

Nunca entendí. ¿Es como una respuesta compleja a las acusaciones de racismo contra la Paisana? ¿Están derrumbando paradigmas? O quizá probablemente sea la sobrina de los productores y querían despegar su carrera o algo. En fin.

No encontré una imagen de la actriz así que imagínate a Dakota Fanning como lustrabotas

No encontré una imagen de la actriz así que imagínate a Dakota Fanning como lustrabotas

Por último, la dirección de Adolfo Aguilar podría catalogarse de amateur. Hay planos enteros en los que solo vemos la cabeza desenfocada de un extra mientras los personajes principales hablan detrás. Sé que Adolfo Aguilar ha trabajado mucho en tele pero su desempeño resalta por su falta de comprensión del lenguaje cinematográfico.

Supongo que simplemente se atrevió a hacer una película pensando que medio a la champa le podría salir bien, así como en esta película la Paisana también es un personaje improvisado con cero esfuerzo que ha alcanzado un éxito espectacular ante nuestra audiencia nacional.

No es sorpresa de que a esta peli de shit le esté yendo regio en la taquilla, ganándole a Thor y no sé a qué más, y es quizá por eso que de una manera meta la Paisana representa los peores valores peruanos del ideal peruano:

  • la chacota,
  • la falta de planificación
  • y la conchudez irreverente de salir ganando a pesar de hacer un trabajo intencionalmente mediocre.
Solo digo

Solo digo

El racismo

Si quieres ser un peruano optimista se podría decir que hay un progreso con el tema racial del personaje de la Paisana desde los 90 ya que hoy en día ya no está rodeada de personajes secundarios recordándole constantemente que “apesta a llama”.

Supongo que esos años de lucha contra el racismo valieron la pena después de todo. Sin embargo, el personaje de Jacinta (que no puede mencionarse sin hacer referencia a que es paisana, me acabo de dar cuenta) sigue existiendo en base a su única característica de personaje:

que no entiende nada.

Creo que todas las acusaciones que salen hoy referente al racismo implícito en la Paisana Jacinta vienen principalmente de personas que nunca vieron su programa  televisivo en el que, a pesar de sufrir intensos abusos y discriminación, usando su fortaleza y honestidad la Paisana usualmente vencía a las personas que buscaban aprovecharse de ella. Estos vestigios de valores no existen en la película y en su lugar tenemos una chanfaina chacotera de una hora y media.

A pesar de que esta peli bien podría llamarse “Chiste racista noventero: La película” lo más preocupante no me parece solo que exista un producto tan mediocre y malintencionado en el 2017 sino que además haya una audiencia masiva que le da buena recepción.

Si alguna vez te preguntaste por qué sigue existiendo algo como la Paisana Jacinta la respuesta es porque a la mayor parte del Perú le afana. Más allá de querer censurar las expresiones que se nos ofrecen creo que es momento de reflexionar sobre por qué está tan mal nuestro consumo cultural como país.

Lo que se nos viene

Lo que se nos viene

Era de esperarse: la película de la Paisana Jacinta es muy mala, pero le ha ido superbien en la taquilla. En la sala a la que fui a ver la proyección de la Paisana Jacinta, la mitad de la audiencia se reía a carcajadas de una película sin chistes mientras que la otra mitad se arrancaba el pelo en frustración sin poder entender, supongo, a qué tipo de persona le puede entretener algo tan bajo como esto.

Viva el Perú

Viva el Perú